Puertas de garaje y automatismos
¿Hay algo mejor que llegar a casa? ¡Cuando entrar con el coche ya te da la bienvenida!
Como con las puertas de garaje. Por la noche, después de una dura jornada, en un día lluvioso de otoño o en invierno, cuando solo pensar en bajar del coche ya hace temblar de frío. La puerta del garaje se abre con solo pulsar un botón, evocando automáticamente una agradable sensación de bienvenida.